Cualquier cerrajero en Santiago conoce el método del resbalón y sabe trucos para evitarlo. Te animamos a seguir leyendo esta publicación para que aprendas a proteger tu casa de la mejor manera posible.

El método del resbalón es una de las técnicas de robo más utilizadas. Con ella se fuerza la cerradura de las viviendas para acceder a su interior. La maniobra consiste en utilizar tarjetas de crédito o radiografías, que permiten abrir la puerta sin necesidad de forzarla ni provocar ningún estruendo que pueda alertar a los vecinos. Los delincuentes simplemente deslizan alguno de estos objetos entre la rendija y el pestillo y los hacen resbalar, de ahí viene el nombre.

Hoy en día es muy fácil conseguir este tipo de materiales por lo que cometer esta maniobra es más accesible que nunca. Pero en nuestra mano también está protegernos mejor. Por eso, puedes contratar un cerrajero en Santiago para que instale en tu puerta una doble cerradura.

Otro consejo viene de la mano de la Policía Nacional, que suele publicar en su redes sociales consejos para evitar robos de este tipo. Una de sus publicaciones, y de la que nos queremos hacer eco aquí, habla de una acción muy sencilla, pero a la que quizás no le damos demasiada importancia. Tan fácil como cerrar la puerta con llave cuando abandonemos la vivienda. De esta forma, en caso de que los ladrones intenten esta técnica, el cerrojo hará tope con la lámina y será imposible que se pueda deslizar el plástico para abrir la puerta. Incluso si solo vamos a salir por poco tiempo, es aconsejable cerrar con la llave y es que, como hemos dicho, este método es muy rápido y silencioso, por lo que, en lo que tardamos en ir a comprar el pan, podemos llevarnos un gran disgusto.

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